Programa de Lunares

Programa para la Detección y Control Temprano del Cáncer de Piel.

Casi todas las personas tienen lunares que pueden tener diferente aspecto, color, tamaño y forma. Pueden aparecer a cualquier edad aunque la mayoría de los lunares lo hace durante los primeros veinte años de vida.

Los lunares en dermatología reciben el nombre médico de nevos. Pueden salir en la piel de cualquier parte del cuerpo incluso en los genitales, en los labios o adentro de la boca y en las uñas.

En los adultos si bien pueden seguir apareciendo lunares, muchos de ellos se pueden achicar e incluso desaparecer con el paso del tiempo. Ante la posibilidad de Melanoma (el mas agresivo tumor maligno de piel), es importante realizar un diagnóstico precoz que permita a su vez un tratamiento quirúrgico temprano, logrando así la curación del melanoma en muchos casos.

Todos las personas deben controlarse los lunares con el dermatólogo por lo menos una vez por año y algunas personas mas frecuente por presentar mas riesgo de desarrollar el cáncer.

El dermatólogo examina toda la piel y si sospecha de algún lunar practicará el procedimiento conocido como DERMATOSCOPIA.

 

La Dermatoscopía o Microscopía de Epiluminiscencia (MEL), es un estudio simple, que no duele y que permite al dermatólogo observar la piel con mayor precisión con una aparato llamado DERMATOSCOPIO. Este aparato sirve para obtener una imagen ampliada y mas clara de las características del lunar. Emplea un sistema de magnificación de las lesiones, con una luz incidental que transilumina la piel y permite un aumento de 10 a 400 veces del lunar, indicando con mayor precisión si se trata de un lunar bueno o no.

La mayoría de los lunares son buenos y sólo se controlan, no siendo necesaria su extirpación. Se quitan los lunares sospechosos de ser malignos.

La Dermatoscopía permite determinar las características de un lunar, estableciendo con más precisión si el mismo debe ser extirpado o simplemente controlado nuevamente. Para esto se toma una foto digital de la imagen dermatoscópica, que permite ver si existen cambios en nuevos controles.

Es importante que cada dos meses usted mismo se mire los lunares, realizando una serie de maniobras sencillas que se conocen con el nombre de autoexamen de la piel.

Este examen consiste en una auto inspección de sus lunares, lo hace en una habitación bien iluminada que tenga un espejo de pared, utilizará también un espejo de mano y va a estar sin ropa.

El objetivo de este examen es que pueda darse cuenta si se produjo algún cambio en sus lunares, o si le apareció algún lunar de determinadas características, para que consulte inmediatamente al dermatólogo.

El autoexamen no le va a llevar más de cinco o diez minutos.